Recibir las materias primas con un eficaz dispositivo de captación de polvo, retirar los desechos, limpiar, mezclar, triturar, calentar los ingredientes, incluso tratarlos térmicamente, secarlos, enfriarlos y eventualmente aglomerarlos y luego desmenuzarlos, tamizarlos, revestirlos, transportarlos de preferencia por medio neumático para reducir los riesgos de contaminación, etc. Son los procesos a los que se someten alimentos como el azúcar, la harina y el almidón, los cereales y oleaginosas (maíz, trigo, cebada, arroz, colza, girasol, soja) y el cacao, entre otros muchos, antes de que lleguen a nuestras manos para ser consumidos.